Scioli no reglamentó la nueva Ley de Tránsito

El legislador socialista Carlos Nivio, que preside la Comisión de Transporte de la Cámara de Diputados, reclamó la inmediata reglamentación de la nueva Ley de Tránsito de la provincia de Buenos Aires, vencido el plazo establecido para que el Gobernador dicte esa norma.

La Ley Provincial Nº 13.927 -promulgada el pasado 30 de diciembre- estableció la adhesión a la Ley Nacional de Tránsito Nº 24.449; no obstante no puede ser aplicada hasta tanto el Poder Ejecutivo bonaerense dicte la correspondiente reglamentación, para lo cual se había dispuesto un plazo de sesenta días.
Nivio, presentó su iniciativa legislativa en función de que el retraso resulta contradictorio con los fines declamados por el Gobernador al aprobarse dicha ley: una mayor fiscalización del tránsito, mejora la seguridad vial y la disminución de los accidentes con víctimas fatales. Sin embargo, continúan vigentes las mismas normas establecidas hace años, sin producirse cambios sustanciales en la preocupante situación actual.

No se puede olvidar que los accidentes de tránsito son la principal causa de muerte en el país de menores de 45 años. Mucho más que el tema que aparece prioritariamente en los medios: la inseguridad. A las muertes y accidentes de tránsito se los ignora sin no conllevan gran cantidad de muertos.

Carlos Nivio, quien integra el Bloque de Diputados de la Coalición Cívica, funda su proyecto en que los Municipios bonaerenses, ante dicha falta de reglamentación, continúan aplicando el Decreto provincial Nº 40 del año 2007, que ha sido cuestionado en cuanto a su legalidad. Tal situación es segura fuente de conflictos entre las autoridades municipales, los propietarios de los vehículos y la Justicia provincial.
Asimismo, el diputado socialista expresó su preocupación por la falta de ejecutividad de la Gobernación, en momentos en que la inseguridad vial obliga a una urgente adecuación de las normas vigentes. Al respecto Nivio recordó que Daniel Scioli desestimó el pasado año el proyecto de nuevo Código de Tránsito, que había sido elaborado y aprobado por todos los bloques de la Cámara, para en su lugar adherir a la Ley Nacional de Tránsito, a la cual ahora tarda en reglamentar.